lunes, 22 de junio de 2015

MÚSICA

La música despierta los recuerdos
y se viste de gala la memoria.
En un caleidoscopio de añoranza
desfilan por la piel
 antiguos besos.
Viejos amores, amores nuevos.


La música me grita que estoy viva.

AMBIGUO

En el párpado absurdo del recuerdo
mil rosas salvajes tejen desvaríos
y contrariedades.
El corazón es un país devastado
donde cayeron las estatuas y los monumentos.
Todos los ídolos están bajo sospecha.
Pinceladas de ambigüedad y hollín
oscurecen el sol de las palabras.
Utopía y verdad, un matrimonio
cuyos hijos han muerto en el destierro,
piden al viento un trago de piedad.
Pero los que detentan la tormenta
festejan su desmesurada sed.
Yo soy un vagabundo más,
un descastado,
una desordenada mansedumbre.
Ni siquiera mis manos certifican
el nombre y la conciencia.
Un frío de intramuros
hace castañetear cada pisada.
Así, los pasos picotean las baldosas
en una alegoría de palomas.
Soy el gran huérfano.
La soledad me acusa.
Y en un último gesto

me declaro inocente.

domingo, 21 de junio de 2015

SIN PALABRAS

Se fueron a hurtadillas
muy despacio.

Se fueron una a una
sin que me diera cuenta.

Primero hubo un silencio
o un sinónimo.

Una onomatopeya
un vocativo.

Las manos, las señales.

Me quedaron los ojos
con sordina.


Estoy despalabrada.

sábado, 6 de junio de 2015

ESTÁ



En el muro,
en el umbral.
bajo el farol,
o en la doblez oscura de la esquina.

En el grillo
en el amanecer
en la paloma
o en el beso de húmedas madreselvas.

Allí, donde comienza la alegría,
en la palpitación de un pájaro violeta,
en el instante de la cópula infinita
que preña de luciérnagas al día.

Bajo el arbusto,
en su sombría boca,
en el pañuelo que lloró mil noches
o en la túnica de la avaricia.


En el pardo embrión del pensamiento
en la hamaca que se hunde en la marea
en  el ojo del viento y sus esclavos
en la pálida voz del desencanto.


En la estoica cintura de la esfinge
en el grito selvático y deforme
en los pétalos lentos de la almohada
en el invierno de los desvaríos.

En el feroz revuelo de los muertos
lo verás
lo encontrarás.

Es tuyo.

lunes, 1 de junio de 2015

maneras

MANERAS

 A su manera, sé, él me quería.
Lo puedo ver ahora en la distancia
y en la entraña latente de la foto.

¿Nos besamos?

Y la moto y el viento y el invierno.

Aunque fue en el verano y en las rocas
la demencia de amor nunca extinguida.

Su risa, su temblor, su pelo refulgente.

Hoy solo me pregunto: ¿estará vivo?

Tal vez mi forma de querer,
tan restringida.
¿Por qué amamos de formas diferentes?

¿