jueves, 4 de agosto de 2011


Bifurcación incertidumbre
convite de la nada
la despasión desnuda
las urgencias.
Entre las multitudes, el silencio:
dinastía de la soledad.
¿Dónde están los crepúsculos fetales?
¿Dónde, la voluptuosa sed?
Venas arcaicas
cumplen su desganado rito de robot.
En el atroz paraíso de la incomprensión
han vaciado las noches
han mutilado los escarpados días.
Un gesto, alguna mueca lo delatan
nadie comprende al lacerado corazón.
Y ya no hay brújula ni tiempo
no hay sobreseimiento

la luz es un oscuro monosílabo
en la avara caricia
sin piedad.

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